La otoplastia es la cirugía que se realiza para reposicionar las orejas prominentes o»en soplillo» a una posición más normal, más pegadas a la cabeza, o para reducir el tamaño de las orejas grandes.

El candidato

Generalmente, es una cirugía que se realiza en niños entre los 4 y 14 años. Las orejas han crecido casi completamente a los 4 años, así que cuanto antes se realice la cirugía, menor será el trauma que pase el niño en el colegio. La otoplastia también se puede realizar en adultos, no existiendo mayores riesgos en esta edad.

En algunos casos la intervención puede ser cubierta por la seguridad social o seguros de salud.

La cirugía

Existen diferentes técnicas para conseguir el resultado deseado, que básicamente consisten en el remodelado del cartílago a través de una incisión detrás de la oreja.

La otoplastia se realiza en el quirófano, dentro de una clínica u hospital, permaneciendo ingresado unas horas generalmente. Si se trata de un niño pequeño, el cirujano plástico le recomendará realizar la intervención bajo anestesia general. Para niños mayores y adultos, se empleará anestesia local asociada o no a sedación, de manera que esté despierto durante la cirugía, pero relajado.

La recuperación

La mayoría de los pacientes, niños y adultos, se encuentran bien a las pocas horas de la cirugía, aunque puede ser recomendable permanecer una noche en la clínica hasta que desaparezcan los efectos de la anestesia general si se ha empleado. Se coloca un vendaje alrededor de la cabeza nada más finalizar la cirugía. Las orejas pueden doler un poco los primeros días, pero se alivia fácilmente con medicación. En pocos días se cambia el vendaje por uno más ligero parecido a una cinta de pelo. Es importante seguir las instrucciones de su cirujano plástico respecto al uso del vendaje, sobre todo por la noche. Debe evitarse durante el primer mes cualquier actividad en la que puedan doblarse las orejas.

La mayoría de los adultos vuelven al trabajo a los 5 días de la cirugía; los niños vuelven al colegio en unos 7 días, siempre y cuando tengan cuidado con las actividades físicas.

Riesgos

Cuando la otoplastia es realizada por un cirujano plástico cualificado las complicaciones son infrecuentes y de poca importancia. Sin embargo, como en cualquier otra intervención, existen riesgos propios de una cirugía y complicaciones propias de este procedimiento. Es imprescindible el estudio preoperatorio.